PANDEMIA POR CORONAVIRUS Y ESTALLIDO SOCIAL
La pandemia por coronavirus ha sido calificada como una de las más graves de los últimos 100 años, tanto por la cantidad de contagiados, de fallecidos y por sus consecuencias económicas.
La pandemia por Covid 19 ingresa a Chile en contexto de movilización social nacional que explotara el 18 de octubre 2019, cuando estudiantes secundarios saltan los torniquetes de ingreso al Metro como forma de protestar ante un alza de 30 pesos del valor del pasaje.
La consigna “NO SON $30, SON 30 AÑOS”, recoge en plenitud el abuso del sistema neoliberal impuesto en dictadura y que mantenido por los gobiernos posteriores al 90, profundizara la desigualdad.
La demanda por una NUEVA CONSTITUCIÓN que cree las bases de una nueva sociedad se hace fuerte y obliga a las autoridades a iniciar un Proceso Constituyente, siendo el primer ito, el Plebiscito del 25 de octubre.
Hasta mediados de octubre, en nuestro país, los contagiados por Covid 19 suman casi medio millón de personas y son más de 18 mil los fallecidos, colocando a Chile, según el número de contagios, en el octavo lugar en el mundo, sin embrago, de acuerdo a la tasa de casos confirmados por millón de habitantes, nuestro país ocupa un lamentable primer lugar, 19.277 por millón de habitantes, lo siguen Estados Unidos con 15.383 y Brasil con 13.949.
Según el número de fallecidos, Chile se encuentra en el noveno lugar, sin embargo, si se considera la tasa de fallecidos, casos por millón de habitantes, pasamos a ocupar el tercer lugar en el mundo, con 520 fallecidos por millón de personas, superados por Perú con 619 casos y España con 610 casos.
Compartiendo que ningún país está totalmente preparado para enfrentar una pandemia como la que el mundo está sufriendo, la crisis sanitaria en Chile, ha alcanzado tal grado profundidad producto del modelo económico neoliberal y las decisiones que en consecuencia con el modelo, adopta la autoridad.
Quizás son las siguientes, las frases de autoridades que reflejan a cabalidad como el Gobierno ha enfrentado la pandemia desde antes de su llegada a Chile:
“Nuestro sistema de salud es uno de los mejores y más eficientes del planeta”, Ministro Mañalich, al compararlo con los países de la OCDE y con todos los países latinoamericanos, 21 de noviembre 2019.
“No podemos matar toda la actividad económica por salvar vidas humanas”, frase de Carlos Soublette, presidente de la Cámara de Comercio de Santiago, 16 de abril 2020.
“Nueva normalidad”, decisión resuelta en La Moneda, por el ministro Mañalich, Cristián Larroulet y el presidente Piñera, 19 de abril 2020.
“En un sector de Santiago hay un nivel de pobreza y hacinamiento del cual yo no tenía conocimiento”. Frase del ministro de salud en ejercicio, Jaime Mañalich, 28 de mayo 2020.
“No hay una relación entre letalidad y pobreza”, ministro salud Enrique Paris, 28 de septiembre 2020, en referencia a muertes por Covid 19.
El Gobierno de Chile, sus autoridades políticas y sanitarias resolvieron enfrentar la pandemia en el nivel hospitalario, en el último nivel, haciendo una gran inversión en la compra de ventiladores mecánicos y aumentando las camas UTI para recibir pacientes covid con insuficiencia respiratoria, desestimando las recomendaciones de las expertos, sociedades científicas, universidades, gremios de la salud quienes desde el inicio de la pandemia proponían hacer frente a la enfermedad evitando el contagio, con testeo, trazabilidad y aislamiento, donde la atención primaria debía jugar un rol protagónico.
Tardías e insuficientes han sido las medidas de apoyo a los trabajadores y sus familias para mantenerlos en casa, donde además, el hacinamiento impide mantener distancia física. Sin la entrega de apoyo, trabajadores y trabajadoras informales y precarizados, se han visto obligados salir a trabajar para dar de comer a su familia, a riesgo de contagiarse y llevar el virus a su casa.
Las autoridades políticas y sanitarias del gobierno de Chile apostaron al mercado y al individualismo extremo, al igual que Estados Unidos y Brasil. Otros países optaron por la responsabilidad social del estado y la solidaridad.
Agregar que la errática conducción del Gob., el ocultamiento de información, decisiones tardías e insuficientes para enfrentar la crisis económica de la familia, haber optado por proteger la economía por sobre la vida de las personas, acrecentó el nivel de desconfianza en las autoridades, cayendo el apoyo al gobierno hasta un 12 % según encuestas del mes de julio.
El nivel de contagios y fallecidos, más allá de adaptaciones en el ámbito sanitario, ha provocado también cambios en las prácticas sociales, cambios en la vida cotidiana, en las relaciones entre las personas.
En el marco de estallido social y pandemia, el Gob. de Chile ha aprovechado para profundizar el autoritarismo, instaurando Estado de Excepción y Toque de Queda que aún se mantiene, medidas más que sanitarias, parecieran tener por objetivo el control de las manifestaciones y movilizaciones callejeras.
No menores han sido los recursos destinados a la compra de sofisticados equipos para carabineros destinados a la represión social, recursos que debían haber sido destinados a resolver el hambre en las poblaciones más vulnerables o para fortalecer la atención primaria de salud.
Importante señalar que la represión iniciada en octubre 2019 ha dado como resultado la violación sostenida de los DDHH por las fuerzas represivas del Estado.
En este ámbito corresponde señalar que luego de 1 año del estallido social de 18 de octubre 2019, según el último informe del Instituto Chileno de DDHH, sobre violaciones a los derechos humanos en Chile, emitido el viernes 18 de octubre 2020, se contabilizan 2.520 querellas y acciones judiciales.
La mayoría (93%) se concentran en contra de carabineros, con 2.340 querellas, le sigue el Ejército con 97, la PDI con 34, y 49 en otras entidades del Estado.
En relación al avance de estas causas, 31 querellas están formalizadas con 78 funcionarios imputados por actos de lesa humanidad. Sobre las víctimas de violaciones de derechos humanos, se reportan 3.023 personas, y 163 heridos con trauma ocular.
En cuanto a la tipificación de los delitos, existen 1.730 querellas por apremios ilegítimos, 460 por torturas, 101 por violencia innecesaria, 5 por homicidio, 35 por homicidio frustrados y 1 por violencia innecesaria con resultado de muerte.
Por otro lado, para enfrentar la pandemia, la población ha debido organizarse con su principal herramienta, la solidaridad. Con la consigna “SÓLO EL PUEBLO AYUDA AL PUEBLO”, se crearon miles de “OLLAS COMUNES” a lo largo del país, como forma de resolver el hambre de miles y miles de familias.
La pandemia, en algunos casos ha provocado el aislamiento y profundizado el individualismo, sin embargo en muchos otros casos, ha crecido el trabajo colectivo, tanto a través de las redes sociales, como presencialmente, es el caso de las “ollas comunes” y “comprando juntos”.
Post estallido social, en una sociedad desigual como la nuestra, con una crisis sanitaria, económica y social que se produce, impacta y se enfrenta también de manera desigual, se puso en marcha un proceso reflexivo y de solidaridad, que dependiendo de la organización alcanzada, permitirá el surgimiento de nuevos fenómenos sociales, que permitirían avanzar hacia un nuevo modelo de sociedad de derechos, poniendo término al sistema neoliberal.
Por otra parte, la falta de preparación de la sociedad para enfrentar una pandemia como la actual, debería transformarse en una oportunidad para mirar el futuro del planeta como una unidad ecológica y prepararnos desde ya, para evitar situaciones complejas productos del cambio climático.
Dr. David Peralta Castro
La Florida, 18 de octubre 2020.
Día del primer aniversario del Estallido Social.
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